20 de marzo de 2012

Y al séptimo descansó

Garath McCleary, autor de cuatro goles contra el Leeds
Uno se pregunta cómo explicar los resultados sorprendentes y abultados. Surgen dudas sobre cómo contarle a alguien que un jugador ha conseguido marcar cuatro goles. Pienso en qué es lo que lleva a un equipo a conseguir una goleada de tal magnitud. Si es por alguna decisión durante el encuentro que lo haya condicionado, como una falta, un fuera de juego, un penalti, una expulsión, o si no tiene nada que ver con eso. Disfruto pensando que estoy siguiendo el minuto a minuto de uno de los encuentros de la temporada, que mientras cada uno celebra los goles de su equipo yo sigo emocionado por las actualizaciones del livescore de turno. Ojalá supiera explicar mejor lo que ocurrió en Elland Road y pudiera argumentar por qué se dio ese histórico marcador o por qué fue tan especial. Pero me gusta creer que simplemente sucede. Que ocurre y punto. Como una especie de regalo para los demás. Y los regalos no se explican. Se desenvuelven, se agradecen y se disfrutan.

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